Es normal que cuando tienes mucho tiempo entre manos, te encuentres en la situación de que poco a poco tu reloj biológico se voltea, y empiezas a levantarte muy tarde, y acostarte igual de tarde. Esto llega a ser un problema, dado que cuando más adelante tienes que levantarte temprano, se te hace casi imposible poder estar activo a una hora pertinente.
Ante esto, hay varias maneras de revertir tu rutina a una más sana y prolifera durante el día, y te las listaremos a continuación.
La relajación es importante
El primer paso que tienes que tomar en cuenta quizás suene como el más sencillo, pero a tu organismo le costará mucho. Al principio solo tienes que acostarte en tu cama, cerrar los ojos y realizar ejercicios de respiración para que puedas alcanzar un estado de relajación que te lleve al sueño.
Por otro lado, el hacer ejercicio habitualmente te cansará y tu organismo te llevará a querer dormir más temprano de lo normal. A partir de esto, puedes empezar a dormir más temprano.
También, recomendamos que comas un poco después de levantarte en las mañanas, para que puedas acelerar tu metabolismo y poder “despertar” a tu organismo más eficientemente.
Lo que debes de evitar
Lo primero que tienes que hacer es ponerte la meta de acostarte y levantarte más temprano, y durar con esto durante un mes, ya que si no lo haces, no terminarás acostumbrándote.
También recomendamos que no trabajes en tu cama, ya que tu cerebro asociará la cama un con área de trabajo y por ello se mantendrá activo.